Actualice las fotos

Las fotos actualizadas a la fecha son:

Spaces 1: Brujas, Amsterdam, Hamburgo y Copenaghue
Spaces 2: Oslo y Los Fiordos noruegos

Espero que les gusten

Saludos

Gaston

Ferry a Finlandia y llegada a Helsinki

El viaje en Ferry hacia Finlandia se hace desde el puerto de Estocolmo, en Suecia, hacia la ciudad finlandesa de Turku, la cual en algún tiempo pasado fue la capital de éste país.

El viaje en ferry fue muy largo, duró aproximadamente 10 horas, pero como viajamos de noche lo aprovechamos para dormir. Pero a decir verdad, no era el mejor lugar para dormir, no solo por carecer de comodidad, sino por el hecho de tener muchas actividades como para disfrutar, como por ejemplo casino, restaurantes, discoteca, free shop, y alguna otra cosa más que en éste momento no logro recordar. Afortunadamente nos pudimos ubicar en una zona bastante aislada del bullicio, y a pesar de que estábamos ubicados en sillones, no era muy cómodo pasar ahí todas las horas del viaje. Nos encontramos con varios chicos del grupo de viaje, y algunos fueron muy inteligentes al llevar consigo sus sobres de dormir, como para conciliar el sueño en el suelo del barco.

A la mañana siguiente, el viernes 17 de agosto de 2007, al llegar y descender en Turku, partimos directamente hacia la ciudad de Helsinki, la capital finlandesa, situada a unas 2 horas de Turku por autopista, en donde debíamos esperar a la gente que hace la excursión a Rusia. No tuvimos problema en llegar a la ciudad, pero nos estamos dando cuenta de que nos está costando horrores poder ubicarnos en las ciudades, y no perdernos!!! Debo reconocer que somos unos "quesos" en ese sentido!!! Estuvimos unos cuantos minutos dando vueltas sin encontrar el camino hacia el camping en una suerte de paseo forzado, hasta que encontramos una camioneta del grupo de viaje de la facultad de arquitectura, que por suerte nos guió hasta el camping, ya que ellos hacía varios días que estában por estos lugares...

Cuando llegamos al camping Oittaa, en la zona de Espoo, nos encontramos con otros compatriotas de la facultad de arquitectura en donde, me encontré con mi prima segunda Florencia, que viene haciendo el viaje de estudios por ésta facultad. Algunos chicos de arquitectura nos contaban cómo les había ido en la excursión a Rusia, que es la misma que nos vamos a tomar nosotros, pero que hicieron con unas semanas de antelación. También nos encontramos con algunos chicos de nuestro grupo, quienes ya habían llegado, con quienes también conversamos, e intercambiamos anécdotas. Ese re encuentro estuvo muy lindo.

Luego de limpiar la camioneta, armar las carpas y acomodar las cosas , salimos a dar una vuelta en la Renault por la noche, pero como no encontramos un parking para dejar el auto no nos bajamos y volvimos al camping.

Mientras estábamos en el centro, vimos que a muchos finlandeses les gusta beber, y mucho, pues eran varias las personas que veíamos en la calle, literalmente arrastrándose por la vereda, debido a los efectos del alcohol. Era gracioso pero a la vez algo triste ver semejante espectáculo. Luego nos enteramos de que la bebida causa varios problemas en la sociedad finlandesa.

El último día antes de comenzar el viaje hacia Rusia no tuvo nada de especial. A decir verdad, lo único que hicimos fue lavar la ropa que nos llevó mucho tiempo en la lavadora y aprontar las valijas como para poder tener todo pronto para la excursión. A su vez, tuvimos una charla con Marcel Blanchard, quien es el encargado de la excursión, acerca de algunos detalles que convenía saber acerca de Rusia.

La verdad que tenía muchas ganas de viajar a Rusia, era un momento que lo veía con mucha emoción.

Los Fiordos - Noruega

Hablar de los Fiordos implica hablar acerca del interior de Noruega, como solemos decir los uruguayos. Y básicamente éste país se caracteriza por ser su belleza natural, su mayor activo en cuanto a turismo se refiere, y no tanto por sus ciudades, como en cualquier otro país.

Luego de recorrer muy a grosso modo la ciudad de Oslo, emprendimos viaje por el sur, tomando la Ruta E 18, rumbo a la ciudad de Bergen, la cual fue en la antigüedad la capital de Noruega. Pero tomando en consideración que lo que nos importaba era disfrutar el increíble paisaje, el viaje que pudimos haber hecho en algunas horas, lo fraccionamos en algún par de días, por sus rutas panorámicas.

Es así que nuestro primer destino lo fijamos en la ciudad de Kristiansand, en una especie de península sobre el Mar del Norte, la cual me daba la impresión de ser una suerte de balneario, pues se podía ver personas bañándose en sus no muy cálidas aguas. Si bien no nos abocamos en conocer éste pequeño pueblo, por lo poco que vi, me pareció bastante atractivo.

Allí nos quedamos en un camping, donde teníamos electricidad gratuita (que a estas alturas es un lujo tenerla), pero lo que me sorprendió en mayor medida resultó ser que el precio de la ducha era el más caro de todos!!! Nos costaba la módica suma de 1.9€ por 5 minutos de agua caliente!!! Pero uno que forma parte de la especie “Uruguayensis Garronieris” siempre se las arregla. El funcionamiento de las mismas consiste en depositar la ficha, pero lo que me causó mas gracia fue que el Albert, cuando insertó las monedas, la máquina no le dio agua caliente, es como que se le “tragó la moneda”. Y así fue que, con una bronca que explotaba, y vestido solamente con su toalla “a la cintura” fue hasta la recepción a protestar que no le había funcionado… Fue increíble!!! Pero por lo menos dio sus frutos, ya que le dieron varias fichas por el inconveniente…jejje. Por suerte no lo llevaron preso por andar en paños menores por el camping… jejje.

Luego de pasar una noche en éste lugar, seguimos nuestra travesía hacia el oeste, y nos desviamos en un punto que creíamos era el mas austral de Noruega, pero no lo era. Se llama Lindesnes y es un poblado donde su mayor atracción es un bello y antiguo faro. Es un muy pequeño pueblito pero muy hermoso, con lindas casitas, muy prolijas, como es costumbre por éstos lugares, y muy tranquilo. Una característica es ver grandes casas que dan hacia una bahía, y sobre ésta, se aprecian ¨garages¨ en donde los propietarios guardan sus respectivas lanchas… Es como si cada casa tuviera un mini puerto techado…. Increíble!!!

Seguimos camino y un poco antes de llegar a la localidad de Egersund, nos detuvimos en una P a los efectos de pasar la noche. Quedamos encantados con el lugar, pues si bien quedaba en la ruta, tenía una muy hermosa vista de un lago, y estaba en muy buenas condiciones, y tenía una hermosa y pequeña cascada.

Y acá debo hacer mención a un hecho que nos impresionó a todos nosotros, y condicionó en parte la forma de pensar de algunos… Luego de haber finalizado nuestra cena, como todas las noches, y estando ya con ganas de armar las carpas para poder descansar, notamos la presencia de un sujeto, a unos 100 metros de donde nosotros estábamos, que se encontraba sólo, recostado sobre una roca, y sin ningún vehículo… O sea no tenía nada que hacer ahí. Esto nos inquietó bastante a todos nosotros, ya que lo primero que pensamos era que éste desconocido estaba esperando a que nosotros nos acostáramos para asaltarnos, o algo así. Así fue como creímos conveniente irnos de esa P, a buscar otro lugar en donde pasar la noche, para no correr riesgos… Y luego de recoger todas nuestras pertenencias, al tratar de encender la camioneta, ésta no respondía. Nos estaba pasando lo mismo que nos había pasado a la salida de Ámsterdam. La computadora de abordo se había desconfigurado y necesitábamos herramientas para poder repararla, pero no las teníamos… Ahí nuestros nervios empezaron a inquietarnos, ya que el desconocido seguía en su lugar, inmóvil desde hacía varias horas. La única solución era que pasara alguien para pedirle ayuda… pero la ruta estaba desierta y eran las 12 de la noche… Que momento!!! Por suerte, al poco tiempo detuvimos a una camioneta, en donde una familia entera viajaba rumbo a Stavanger, a unos 100 km del lugar… Y fue nuestra salvación, ya que justo tenía la herramienta para solucionar el problema… Estábamos inmensamente agradecidos con el señor, el cual, hablaba inglés a la perfección, y era extremadamente amable… Pero lo raro fue su bondad, el haberse detenido en la madrugada para ayudarnos, despreocupándose del riesgo que podría estar corriendo al detenerse ante 5 desconocidos, a esas horas de la madrugada. Además en su auto se encontraba su esposa, embarazada y una pequeña hija de ambos… Yo creo que tenía más cosas para perder que para ganar. Fue algo increíble, como una señal, algo que nos conmovió a todos… Yo me pongo a pensar, que si hubiera sido al revés, nosotros no hubiéramos parado… Pero ese acto, nos hizo pensar a todos en forma distinta.

Por supuesto que de ese lugar ¨endemoniado¨ nos teníamos que ir, a pesar de que el ¨sospechoso¨ se había ido, pero ya todo el encanto del lugar se había perdido… Así fue como nos fuimos a otro lugar cercano y mas resguardado. Nos detuvimos en una estación de servicio, muy cerca de la ciudad de Stavanger, en donde tendimos nuestra carpa, sabiendo que no estaba permitido, pero como la estación estaba cerrada y no había nadie, nos instalamos igual, a sabiendas de que nos teníamos que retirar bien temprano en la madrugada, para que no se dieran cuenta de nuestra presencia.

Luego de esto, que viene siendo un hábito bastante saludable, nos fuimos hacia el centro de Stavanger, una linda pero pequeña ciudad, sobre la costa pero un poco mas al norte. En cuanto a la arquitectura de la ciudad, a mi personalmente me gustaron mucho las casitas de madera, típicas en toda Noruega. Dimos una pequeña vuelta por la ciudad, hasta que nos fuimos hacia el puerto, para poder tomarnos el Ferry que nos llevaría hacia Prekestolen.

Prekestolen forma parte del increíble Fiordo de Lysefjorden, que es una de las zonas turísticos más importantes de toda Noruega, cuyo punto supremo es el Pulpit Rock, un precipicio de unos 600 metros de altura, y con una vista panorámica única.

Lamentablemente el tiempo era muy adverso para nuestros intereses, y una neblina cual si fuera una cortina nos impedía apreciar el paisaje!!! Para poder llegar a éste punto, es necesario realizar una caminata de cerca de una hora y media y 4 kilómetros aproximadamente, por entre medio del bosque, en un desafío de turismo aventura o trekking que hasta ese momento no habíamos realizado. Fue muy divertido, pero a la vez peligroso, ya que la humedad reinante hacía extremadamente resbaladizo el camino, mayoritariamente de barro y rocas…

Luego de ésta parada obligada, emprendimos nuestro viaje hacia Bergen, ciudad a la cual llegamos luego de muchas horas de ruta atravesando pueblos (como Hjelmeland, Nesvik, Odda y Jondal), montañas, lagos, ríos, cascadas (como la Latefossen), y muchos túneles por entre las montañas. Me gustaría mencionar que a medida que nos íbamos acercando hacia Bergen, el paisaje era cada vez más maravilloso, cada vez nos encontrábamos con mejores rutas panorámicas, y con muchas más cosas para ver que en la primera parte de la recorrida por el sur. Esa noche la pasamos en un camping cercano a la ciudad, en la localidad de Oystese.

Cuando llegamos a Bergen, a la mañana siguiente, tuvimos la dificultad de encontrar un lugar en donde dejar la camioneta, ya que no habían parkings disponibles, y así poder recorrer la ciudad a pie. Es una ciudad muy pintoresca, pero lamentablemente no la pudimos recorrer caminando pues estaba lloviendo, sólo la recorrimos en auto. Aquí nos volvimos a encontrar con las típicas y hermosísimas casitas de madera. Bergen es la antigua capital de Noruega, y actualmente es la segunda ciudad en importancia.

Luego de haber visitado ésta bella ciudad, tomamos la decisión de visitar un punto que nos habían recomendado, y que no podíamos dejar de visitar. Nos dirigimos hacia el norte a visitar el increíble Glaciar Azul de Jostedalsbreen, en el Fiordo de Sogn et Fjordane. Es una montaña cubierta de hielo color azul, de una gran extensión. Nosotros llegamos solamente hacia donde inicia el glaciar, ya que para poder ascender y adentrarse en el mismo, es necesario poseer el equipo idóneo para poder caminar sobre hielo. Para poder llegar al hielo es necesario realizar una caminata de trekking al estilo la que hicimos en Prekestolen, atravesando por entre los bosques, las rocas, y los cursos de agua. Verdaderamente haber visto ese paisaje majestuoso fue algo que nos sorprendió a todos. Nunca imaginé que ver ese glaciar me fuera a impresionar tanto como lo hizo. Fue una muy grata sorpresa. Lógicamente nos sacamos varias fotos pero lo novedoso fue haber tomado agua del glaciar, el cual se estaba derritiendo. Estaba muy fría el agua lógicamente y era rica, era como tomar agua en su máxima pureza.

Ya habiendo visto esto nos quedamos muy conformes y retomamos el camino por las panorámicas rutas que nos estaba regalando la magistral Noruega. El destino final lo constituía la capital, Oslo, pero siempre la idea era disfrutar de los paisajes.

En toda nuestra travesía por Noruega siempre tuvimos ganas de quedarnos una noche en una cabaña, muy comunes por éstos lugares. Es así que prácticamente por casualidad encontramos una la cual nos encantó desde el primer momento en que la vimos, y no dudamos ni un instante en pasar la noche en ella, en el pequeño poblado de Ardal, cerca de Oslo. Fue un muy buen lujo que nos dimos. Además estábamos necesitando ¨parar¨ un poco las corridas, hacía mucho frío como para dormir en carpa, y no teníamos ganas de pasarla mal…

A la mañana siguiente, y luego de una noche espléndida con estufa a leña, emprendimos el camino rumbo a Oslo.

Cuando llegamos a Oslo, la idea era poder recorrerlo caminando, pero tuvimos la mala suerte de que el clima no nos era muy favorable, pues estaba lloviendo en gran medida. Es así que tomamos la decisión de irnos rumbo a Estocolmo, en Suecia, desde donde nos tomaríamos el ferry a Finlandia, y poder ganar algunas horas, y no andar tan apurados… La experiencia en Noruega había sido magistral, pero había llegado a su fin.

Oslo – Noruega

Desde Copenhague en Dinamarca cruzamos la Bahía Kattegat por un larguísimo puente hacia Malmo, en territorio sueco, para emprender camino hacia Oslo, la capital de Noruega, en un viaje de unas cuantas horas.

Al llegar a ésta ciudad, una de las capitales más pequeñas del mundo, con un poco más de 500.000 personas, dimos algunas vueltas por el centro sin saber exactamente a dónde ir.

Finalmente decidimos recorrer las afueras, dado que carecíamos de tiempo y preferimos visitar algunos museos, para luego de hacer los fiordos, volver a la ciudad, y esta vez sí, conocer el centro.

Es así que fuimos al museo de los Vikingos y el del rompe hielos Fram, ingresando gratis a ambos gracias al carnet de prensa. Ambos resultaron bastante interesantes para conocer un poco más de la cultura vikinga. En el primero habían muchos restos de barcos, armas y otros artefactos utilizados por ésta civilización tan antigua. El segundo era un museo exclusivo del barco Fram, el cual fue un barco utilizado en expediciones en el Mar Artico. El problema resultó en que no sabíamos que el parking de ambos museos era pago, y las 2 veces que dejamos el auto en el estacionamiento nos multaron!!! La cifra mejor no la digo porque me pone mal, pero no se ni siquiera cuando ni donde pagarla... jejje.

Luego visitamos el parque Frogner, uno de los más importantes de la ciudad, en donde nos sacamos fotos muy graciosas en sus estatuas creadas por el escultor Vigelands, uno de los más importantes por estos lugares, las cuales son muy raras.

Luego de éste divertido paseo, era la hora de continuar nuestra travesía, y ésta vez visitar los increíbles fiordos noruegos.

Copenhague – Dinamarca

En Copenhague estuvimos todo el día en la calle. Salimos del camping temprano en la mañana del 7 de agosto, día del cumpleaños de mi abuela, y dejamos el auto en un estacionamiento céntrico, para poder recorrer la ciudad caminando.

Lo primero que hicimos, como casi todas las veces, fue dirigirnos hacia la Tourist Information Desk, en donde nos informamos acerca de los lugares que podíamos visitar. Así fue que empezamos a caminar por la muy pintoresca Frederiksberggade Stroget, una peatonal céntrica. Caminamos por muchos lugares y entramos a algunos museos. Ingresamos al museo de records Guiness, el museo de la segunda guerra mundial y el museo de cera de Louis Tussaud, que me imagino debe ser algún familiar de la Madame que se encuentra en Londres.

Es increíble lo útil que nos ha resultado el carnet de prensa, el cual lo hemos utilizado de forma increíble en los lugares más inslitos!!! Recorrimos muchas zonas hermosas de la ciudad. Lo que me pareció la parte mas linda es la zona portuaria, con muchos restaurantes, una arquitectura hermosísima y paseos en bote. Pasamos por algunos parques en donde había gente tomando sol, incluso nos sorprendimos con alguna chica haciendo topless.!!! Conocimos también la famosa estatua de la sirenita, la cual no nos llamó para nada la atención, aunque en verdad no sabíamos nada acerca de ella, y quizás por eso no la supimos valorar...

Me pareció una muy linda ciudad, pero en verdad estábamos de pasada por aquí, ya que queda de camino hacia Noruega. Después de visitar Rusia, vamos a volver a visitarla para poder intentar conocer algo más de la capital danesa.

Ya a media tarde, emprendimos camino hacia Noruega, atravesando primero las rutas suecas.

Hamburgo – Alemania

Luego de visitar la capital "naranja", nos fuimos a esta ciudad alemana. Una ciudad relativamente grande, pero que no tenía muchas cosas para ofrecernos, o que quizás no supimos aprovechar.

El viaje hacia Hamburgo se caracterizó por ser un tanto accidentado en la ruta... Cuando partimos de Amsterdam, tomamos la autopisa (caracterizada por un paisaje al cual nosotros no estabamos acostumbrados por carecer en nuestro país: molinos de viento para aprovechar la energía eólica) con la intención de tener un viaje más directo y tranquilo.

Pero al poco tiempo de partir, y estando en territorio holandés, sentimos un fuerte estruendo que nos asustó a todos. Cuando nos detuvimos nos dimos cuenta de que la mesa que llevábamos atada al techo de la camioneta había volado literalmente por los aires golpeando el asfalto. De milagro no habían coches que venían atrás nuestro, pues de lo contrario hubiera sido una tragedia. Pero afortunadamente fue solo un susto. Lógicamente que a esa endemoniada mesa la dejamos tirada al costado de la ruta, no queríamos saber más nada de ella. Pero cuando ingresamos al auto para continuar la marcha, la camioneta no encendía. Se había desconfigurado la computadora de abordo vaya uno a saber por qué, y no la podíamos encender... No teníamos forma de comunicarnos para pedir ayuda, ya que carecíamos de celular, pero afortunadamente a los pocos minutos se detuvo un auto de la policía, el cual nos ayudó a solicitar ayuda al servicio de asistencia gratuito de Renault. Y así fue como, luego de una hora aproximadamente y un reseteo de la batería por parte de un mecánico, retomamos la marcha, con la sensación de que lo que nos acababa de pasar, no debería haber ocurrido... y rezando para que no nos vuelva a suceder nada similar...

Llegamos a la ciudad de Hamburgo en la noche del Sábado 4 de Agosto, y como ya es habitual, nos costó ubicar el camping. Lamentablemente cuando por fin lo encontramos, luego de un buen rato ambulando por la ciudad, el mismo ya había cerrado, y no nos dejaron entrar!!!! Para peor el guardia de seguridad no hablaba inglés, y no pudimos pedirle asesoramiento... Pero como era sábado por la noche, decidimos cambiarnos en el estacionamiento mismo del camping, y salir a recorrer la zona de St. Pauli, donde sabíamos que había muy buen movimiento. Y pasamos bastante bien, estuvo muy divertida la salida. Descubrimos que Hamburgo también tiene una zona roja, pero es de solo una cuadra, en donde las chicas se exponen de la misma forma que en Ámsterdam. También hay mucho sex shop y bares de striptease, y muchas discotecas y pubs.

Quedamos gratamente sorprendidos con la movida nocturna, había muy buena onda en las calles, animo de fiesta, etc.

A la mañana siguiente, cuando quisimos hacer el check in en el camping, resulta que el camping no tenia mas disponibilidad!!! Fue una muy fea sensación, ya que estábamos muy cansados. O sea, nos embromamos!!! Detuvimos la camioneta en un parque aledaño al camping, pero había mucha gente, pues había como una gran feria. Así fue como tuvimos que dormir nuevamente una siesta en la camioneta, bastante incómodos, sin habernos bañado, y con hambre

Luego de la siesta reparadora, de día volvimos a la zona de St. Pauli, en donde hay algunos puntos de interés. Caminamos por algunas calles y visitamos la catedral de Saint Michel, y me pareció muy linda. En verdad me pareció algo chata la ciudad de día. Con poco monumento (lo cual puede ser lógico ya que era domingo), poca arquitectura linda, quizás por haber pertenecido a la Alemania Oriental.

De tardecita viajamos al Norte hacia un pueblo llamado Lübeck, en donde pasamos la noche en un camping para, a la mañana siguiente partir rumbo a Dinamarca.

Ámsterdam – Holanda

En Amsterdam estuvimos algo así como 3 noches, alojados en las cómodas suites del camping Gaasper, en las afueras de la ciudad. Y ya estaba arrancando lo que vendría a ser un viaje distinto al que veníamos haciendo, sin las comodidades a las que veníamos acostumbrados, de hoteles, buena comida y excursiones pagas.

Arribamos a Amsterdam en la tarde del Miercoles 1º de Agosto, luego de visitar la pequeña Brujas.

Lo primero que hicimos al llegar al muy buen y espacioso camping, fue empezar a armar todos los utensilios de camping que habíamos adquirido en aquella larga tarde en el Carrefour de París, en donde nos aprovisionamos. Es así que tuvimos que armar las 2 carpas, inflamos los colchones de aire, abrimos los sobres de dormir, desplegamos la mesa y las sillas, etc. Tambien tuvimos que cocinarnos la comida, pero en verdad esa es una tarea que se la deje a mis compañeros pues mis habilidades culinarias son prácticamente nulas.

Otra de las cosas a las que tuvimos que acostumbrarnos era tener que pagar para bañarnos!!! En este camping nos cobraban 0.8 € por 5 minutos de agua caliente!!! Y a mi que me gustan las duchas largas!!! Pero me las arreglé bastante bien. El truco para aquellos que no saben como hacerlo es enjabonarse sin dejar el agua abierta y recien insertar la ficha al final, para enjuagarse. Nada fuera de lo común verdad??? Es sólo un poco más incómodo que el baño tradicional...

En estos días en que nos quedamos, recorrimos bastante, pero también nos quedaron muchas cosas por recorrer. Quizás por la falta de experiencia, no aprovechamos al 100% el tiempo disponible. Para los interesados, hay unos recorridos guiados para turistas en varios idiomas que pueden ser muy utiles para visitar las zonas mas relevantes cuando se carece de tiempo. Nosotros lamentablemente no llegamos en hora a ellos...

Ámsterdam es una hermosa ciudad repleta de canales y puentes, como en Brujas, y también se puede recorrer caminando. Debido a ésto y gracias al precio de los estacionamientos, el cual es muy caro, todos los días dejábamos la camioneta en el camping, lo cual era gratuito, y caminabamos casi 2 cuadras para dirigirnos a la estación de subte. El mismo es el medio de transporte por excelencia para quienes se quedan en el camping pues nos deja en el centro de la ciudad, centro de la movida turística, y no es muy costoso. En Amsterdam mucha gente también se desplaza en bicicleta.

Dentro de los puntos turísticos, vimos el Palacio Real, situado en la Plaza Mayor o Plaza del Dam, en donde se encuentra la Reina y el Rey, vimos el museo de Madame Tussaud, situado en la misma plaza, pero no ingresamos; nos llamó la atención un inmenso estacionamiento de 3 pisos exclusivo para bicicletas, muy cerca de la Estación de Trenes. Pasamos por la casa en donde vivió la famosa niña Anna Frank, y visitamos la Heineken Experience, un museo interactivo de la famosa cerveza, el cual es muy divertido.

Fuimos a la famosa zona roja, un barrio de varias cuadras a la redonda en donde algunas señoras se ofrecen por 50 € para hacer de compañía durante 20 minutos. Es como ir a comprar ropa o zapatos, pues las chicas están atrás de unas vidrieras y uno elige a cual quiere... En cuanto a gustos se refiere, se puede encontrar de todo, hay mujeres increíblemente hermosas y otras que más bien se acercan a lo contrario... La visitamos de día y de noche, y hay mucho movimiento. Y vimos muchas tiendas relativas al sexo, y hasta 2 museos con esa temática de fondo.

Los Coffee Shops son tiendas en donde se puede comprar marihuana básicamente. Amsterdam es una ciudad repleta de Coffe Shops y otros "Bares". Uno muy interesante es el Museo Café "David y Goliath", con una gigantesca estatua del segundo personaje mitológico, pero en éste no creo que se disponga en el menú de sustancias alucinógenas, yo diría que es un restaurant bastante tradicional. Encontramos el Cannabis College, un instituto que se dedica a informar acerca de las drogas y su consumo "inteligente, no dáñino" por llamarlo de alguna manera. Allí nuevamente nos hicimos pasar por prensa para poder ingresar. Pero esta vez si que nos hicimos los profesionales y tuvimos una especie de entrevista con la encargada, en donde le hicimos algunas preguntas relativas a las drogas en Holanda, y nos sorprendieron algunas de sus declaraciones. Por ejemplo el consumo de marihuana no esta legalizado sino que esta tolerado, una misma persona no puede comprar mas de 5 gramos de hierba por dia, y existe mercado negro de todas formas, entre otras cosas que nos comentó. Estuvo muy interesante.

Hicimos un poco de vida nocturna, pero nos imaginábamos otra cosa de la noche. Era bastante tranquila. Conocimos a Ernesto, un uruguayo residente ahí, el cual resultó ser un gran entendido de la vida nocturna, y supo sernos de gran ayuda como guía. La primera noche nos dio un pantallazo general de lo que es la vida nocturna en una salida muy divertida, caminando, que se hizo muy amena, por los principales pubs. A la noche siguiente también salimos a repetir la experiencia pero estuvo más tranquila que la anterior. De todos modos fuimos a una discoteca llamada Elfo Eleven, de Electrónica situada en el Piso 11 de un edificio muy moderno y bonito que resultó ser un gran museo de arte.

Amsterdam fue una ciudad muy intersante de visitar, la cual se disfruta mucho por la gran diversidad de atracciones turísticas.

Al medio día del Sábado 4 de Agosto, partimos de la encantadora Amsterdam para emprender un accidentado viaje hacia Hamburgo...

Brujas – Bélgica

La salida de Paris fue mas tarde de lo que nosotros hubiéramos querido. Nos llevó mucho tiempo realizar todo el surtido en el supermercado, y acomodar todas nuestras pertenencias en la camioneta, la cual venía absolutamente repleta, sin espacio para nada más.

Y tomamos la ruta a eso de las 20 hs., aun siendo de dia. Pero lógicamente se vino la noche durante el viaje, nuestro primer viaje en la camioneta. Era el momento temido por nosotros, pero a la vez esperado... Aqui comenzarian nuestras peripecias por Europa, 5 uruguayos deambulando por terrenos desconocidos... en una camioneta...

La oscuridad no fue un condicionante muy importante, ya que nos arreglamos bastante bien para arribar a destino. Nuestras esperanzas para un viaje placentero por la autopista las veníamos dejando en la Guía Michelin, y la misma no nos defraudó.

Lo divertido del asunto es que llegamos a Brujas a eso de las 12.30 am, en la madrugada del miercoles 1º de Agosto de 2007, hora en que en la pequeña localidad de Brujas, estaba todo cerrado!!! Y eso si que nos complicó bastante!!! No teníamos idea de donde quedaba el camping como para poder instalarnos, aunque de todos modos, a esa hora iba a estar cerrado, solo que ésto ultimo, nosotros en ese momento no lo sabíamos.Y ni que hablar de lo que significaría armar la carpa por primera vez, a oscuras...

Tampoco encontrábamos ningún albergue en la vuelta, y fue sólamente en el único que encontramos, que nos dijeron que estaba lleno y no tenían camas para nosotros... Luego de esos intentos fallidos, estuvimos cerca de 2 horas dando vueltas en círculos sobre la pequeña ciudad sin obtener suerte y sin saber a donde ir, con mucho sueño y malhumorados, y con muchas ganas de dormir. Uno de los inconvenientes de estar ahí era que no disponíamos de un mapa de la ciudad, entonces nos encontrábamos totalmente desorientados... Nos dirigimos sobre una ruta hasta que encontramos un parque aledaño a esta, en donde creímos que sería un buen lugar para detenernos a dormir, y tomarnos una siesta para poder descansar, y aprovechar la jornada siguiente para conocer Brujas.

El sol, el ruido y el calor, nos despertaron a todos, luego de nuestra primer noche de esta etapa del viaje, habiendo dormido sin haberlo planificado, en la camioneta, al costado de una ruta que no sabíamos a donde nos llevaba. Y lógicamente que a cualquier persona que vaya por la calle le sorprendería ver a un grupo de 5 jovenes, andando en terrible camioneta, durmiendo y viviendo en la calle. Todos los que pasaban por al lado nuestro veían como nos lavábamos los dientes y desayunábamos ahí, como si estuvieramos acampando en la angosta ruta. Pero eso verdaderamente, no nos estresaba en lo mas mínimo. Lo que sí no nos hizo ninguna gracias fue el hecho de haber dormido tan mal, todos apretados en la camioneta, practicamente sentados... Yo fui bastante afortunado pues me encontraba manejando cuando nos detuvimos, y pude conciliar el sueño en el asiento del conductor, con bastante más espacio que los que durmieron en la fila trasera de asientos...

Dicen que Brujas es un pueblo que se puede recorrer caminando, y tienen razón!!! Y es una belleza, repleta de canales y construcciones muy antiguas.

Luego de desayunar en una suerte de Picnic, retornamos a la ciudad para ver que tenía la famosa Brujas para ofrecernos y deleitarnos... El mayor atractivo de Brujas es su centro histórico, que mantiene prácticamente intacto el estilo arquitectónico medieval.

Y así fue como salimos a recorrer el centro de la ciudad, luego de haber dejado la camioneta en un estacionamiento techado y vigilado... Visitamos en una tarde los puntos mas importantes...

Recorrimos la plaza Burg, en donde vimos construcciones de hace 300 años, así como la plaza Markt o Mayor. Estas son las 2 plazas mas importantes, y se encuentran muy cerca la una de la otra, en el centro de la ciudad.

En la plaza Markt subimos los 366 escalones de la Torre del Campanario Belfy, obviamente mediante el mágico carnet de prensa, que nos ahorro 5 € a cada uno. Desde la cima del campanario la vista es hermosa, y nos brinda un panorama general que vale la pena... El campanario es el símbolo más popular de la ciudad, gótico, de los siglos XIII a XVI, con 83 metros de altura. Se trata de una poderosa torre, que alberga un pequeño museo dedicado al edificio y su historia.

En la Plaza Burg, hay varios elementos de interés: la antiquísima basílica de la Santa Sangre, el Ayuntamiento, una antigua escribanía renacentista y un palacio del siglo XVI.

Otra de las cosas que hicimos en Brujas fue tomarnos unos botecitos que nos dieron un tranquilo paseo por sus canales. Brujas es considerada, junto con Amsterdam y Estocolmo, la Venecia del Norte, debido a la gran cantidad de canales que la atraviesan, y a la belleza de los mismos. Fue muy lindo y es una experiencia recomendable pues no es muy costoso y se tiene otro panorama de la ciudad... desde otro ángulo, y se puede acceder a lugares mas remotos...

Despues de una jornada visitando esta gótica ciudad, emprendimos viajerumbo a la ciudad de Amsterdam...

De Compras en Paris

El último día en Paris fue muy particular. Dejamos el albergue a eso de las 10 de la mañana, pero entre que ubicamos las valijas en la camioneta y definimos la ruta en la que íbamos a viajar a Brujas, nos fuimos mucho mas tarde.

Fuimos directamente al Carrefour más cercano al albergue, pues debíamos realizar el surtido para los restantes días, debido a que era mas barato que en Holanda. Además teníamos que asegurarnos de comprar todos los artículos de camping que íbamos a utilizar en Europa: carpa, sobres de dormir, colchón inflable, garrafas, linternas, etc.

Y las compras nos llevaron aproximadamente 5 horas!!! Si!!! 5 horas dentro del supermercado, y en la tienda de camping adyacente... Pero eso sin considerar que nos llevó cerca de 2 horas más reacondicionar el espacio de la camioneta en el baúl, espacio que antes de las compras ya venía bastante limitado. Luego de un gran esfuerzo la tarea fue superada.

Después de finalizar con todo ésto, ahí si, a eso de las 20 horas, partimos para Brujas, a una hora muy tardía para hacer ruta, y más aún para llegar a una pequeña ciudad...

Paris - Francia

La llegada a Paris fue bastante temprano en la mañana, luego de haber viajado toda la noche en bus. Si bien viajamos de noche, tuvimos muchas interrupciones, totalmente imprevistas para nosotros, y durante la madrugada, lo que significó no poder conciliar profundamente el sueño. Primero para hacer el tramite de migraciones, y luego para tomarnos el ferry para atravesar el Canal de la Mancha hasta Calais, desde donde continuaría nuestro viaje en bus...

Al llegar a la terminal francesa, el jueves 26 de Julio, nos desplazamos en subte hacia la no muy céntrica estación de Porte de Bagnolet, en donde el Hostal D´Artagnan se encuentra.

El primer paseo en Paris lo constituyó el barrio de la Defensa, en donde los modernos y altos edificios se encuentran. Allí vimos el rarísimo y moderno Arco de la Defensa, que deslumbra a aquellos que no lo conocen...

A continuación, y a pesar de estar muy cansados, decidimos caminar muuuuuchas cuadras, hasta llegar al Arco de Triunfo, por la Avenida Charles de Gaulle, que luego cambia de nombre y pasa a ser la Avenue de la Grande Armée hasta que llega al Arco. Desde ahí tuvimos el primer avistamiento de la Torre Eiffel... hermosa!!!

Nos quedamos en ésta ciudad seis días, dentro de los cuales visitamos muchos puntos turísticos de interés, los cuales pasaré a detallar...

Ingresamos al gran Museo del Louvre, uno de los más importantes del mundo, mediante nuestro mágico carnet de prensa. Y ahí se encuentran una infinidad de obras, patrimonio de la humanidad. Le dedicamos unas cuantas horas, pero de todas formas no nos dio el tiempo para recorrerlo en su integridad. Lógicamente no nos perdimos La Gioconda, de Leonardo Da Vinci, la cual representa el bien mas preciado del museo. Vimos esculturas, esfinges, jeroglíficos y momias egipcias. Vimos la Victoria de Samotracia y la Venus de Milo. También vimos obras de los pintores italianos, ingleses, franceses y españoles mas importantes. Vimos mobiliario de la época de Luis XIV, y muchas otras antigüedades mas!!! Se pueden visitar colecciones de antigüdades orientales, arte islámico, entre otras...

Paris es una ciudad que si bien es grande, se puede recorrer caminando, o en subte. Y así es como la conocimos nosotros.

Pasamos por la Plaza de la Concordia (donde se encuentra el Obelisco de Luxor, cuya réplica conocimos en Egipto: si si, el original esta en Paris y no en Egipto), la Iglesia de la Madeleine, la Opera Garnier (antigua) y la Opera moderna, construida por el célebre arquitecto uruguayo Carlos Ott. Subimos al mirador del edificio de las Galerias Lafayette (desde donde se puede apreciar una gran y hermosa vista), y pasamos por la conocida esquina del Café de la Paix.

Uno no puede irse de Paris sin visitar la Torre Eiffel. Nosotros la subimos en su integridad, hasta el tercer nivel. Los dos primeros pisos caminando, y para el otro en elevador.

Fuimos al Hotel de los Inválidos a ver el Panteón de Napoleón, y al Museo de la Armada, en donde nos pasó algo insólito. Quisimos pasar con el carnet de prensa, pero nos dijeron que solo la prensa europea podía ingresar gratis. Ante tal y semejante discriminación, nos hicimos los ofendidos y manifestamos nuestro total desacuerdo con tal reglamento, dijimos que no podía ser, que íbamos a hacer un muy mal informe, que queríamos hablar con el encargado, etc!!! Imagínense la cara del tipo ante terrible contra ataque!!! Por supuesto que a los pocos minutos teníamos las entradas con nosotros… jejjeje. Uruguayo garronieri…. Jejje

Nos sacamos hermosas fotos en el Puente Alexander III, que cruza el Sena. Pasamos por la puerta del Museo D´Orsay pero no ingresamos. Visitamos la Catedral de Notre Dame por dentro, y la misma es muy especial. Camino a ella, fuimos bordeando el Río Sena y descubrimos por casualidad que había una playa privada, sobre el Río mismo, a la cual se puede ingresar a refrescarse... Fuimos a conocer la plaza de la Bastilla, pero es sencillamente un obelisco intrascendente. Yo ya la conocía de un antiguo viaje, pero mis compañeros se vieron algo decepcionados pues es sólo un obelisco, se imaginában algo más...

También recorrimos la Avenida Champs Elysées hasta llegar al Arco de Triunfo, al cual subimos para ver la vista panorámica. Desde ahí fuimos a saludar a nuestro Prócer Artigas, ya que en la Plaza Uruguay hay un busto con su imagen, a unas pocas cuadras de distancia.

Otro lugar al que fuimos fue la zona de Montmartre, donde está situada la Basílica de Sacre Coeur, en la cima de una colina, con una gran vista de Paris, en cuyo alrededor se puede apreciar un estilo bohemio muy interesante. Es una zona comercial en donde se encuentran diversidad de cafés, restaurantes y cabarets, siendo uno de los más famosos, el Moulin Rouge.

Tuvimos que recorrer una gran distancia para visitar el Palacio de Versailles. Para llegar al mismo nos tomamos el servicio de tren que nos deja en 45 minutos. En el Palacio, recorrimos sus parques y sus salas más relevantes, como por ejemplo la de los Espejos, la Recamara del Rey, el Salón de Marte y el Salón de la Abundancia. Lamentablemente no lo recorrimos todo, ya que lo visitamos de tarde, proximo al cierre de la jornada, asi que completarlo quedará para otra vez...

Aquí en Paris fue donde tomamos la camioneta, en la cual recorreremos buena parte de Europa. Es una Renault Espace, diesel 2.0 con muchos comandos electrónicos guiados por una computadora de abordo. Es verdaderamente una nave.

Abrazo grande,

Gaston

Londres - Inglaterra

Me voy a tomar el atrevimiento de calificar a esta magnífica ciudad como la mas hermosa del mundo. Y lo es pues en ella se encuentra absolutamente de todo. Pero lógicamente ésto se trata sencillamente de un comentario..., y no pretende ser nada mas...

El vuelo de Atenas lo tomamos el jueves 19 de julio de 2007, rumbo al aeropuerto de Heathrow, en Londres. Como el avión partía a las 8 a.m., tuvimos que hacer un gran "madrugón" para llegar en hora, pero cuando uno viaja también hace sacrificios, sólo que en casos como éste, se hacen con gusto... El tema fue que al llegar a suelo inglés, estuvimos solamente unas horas en Londres, pues decidimos tomarnos un bus hacia Liverpool en donde nos quedamos algunos días, para luego de ello, recorrer la capital inglesa.

Es así que desde Liverpool nos tomamos un bus que nos llevó directamente a la Victoria Coach Station, en Londres. Desde allí nos teníamos que dirigir hacia uno de los centros de la ciudad, Picadilly Circus, en donde nuestro albergue se encontraba. Y me expreso en plural pues en Londres no se puede identificar un sólo "Centro", debido a sus dimensiones... aunque Picadilly es seguro, de los más importantes.

Y se puede decir que a esta increíble ciudad la recorrimos casi toda. Fue muy cansador pues andábamos a las corridas, pero muy gratificante por todas las cosas que hicimos y conocimos.

La forma en que la conocimos fue a través del “The Tube”, su amplísimo sistema de subterráneo, el cual funciona a la perfección, con una muy amplia gama de líneas, que permiten llegar de un punto a otro en muy poco tiempo. Para eso nos comprábamos los “daily pass” que por 4 libras, te daban pase libre a todo el transporte público de la ciudad por un día.

Visitamos los puntos mas importantes de la ciudad, como por ejemplo el Saint James Park, la Trafalgar Square con su monumento al almirante Nelson, el 10 de la Downing Street, lugar de residencia del Primer Ministro . Conocimos uno de los símbolos de la ciudad, el Big Ben y el Parlamento, el cual es majestuoso, con su estilo gótico, es de una belleza soberbia.

Desde el comienzo Londres es una ciudad que nos atrapa... con todas sus particularidades que se ven a diario, como sus clásicos taxis y buses de 2 pisos, los Double Decker, las casetas telefónicas o hasta incluso la Policía, con sus muy simpáticos atuendos...

Muy cerca del Big Ben se encuentra la Abadía de Westminster, de estilo gótico, pero como no nos dejaron pasar con carnet de prensa en forma gratuita, no quisimos ingresar pues el costo era algo excesivo para nosotros en ese momento (tenemos que ser selectivos a la hora de realizar los paseos).

Atravesamos el Támesis para conocer el Jubilee Garden, en donde se encuentra el Acuario y una exhibición temporal de Salvador Dalí a la cual ingresamos, pero no nos gustó mucho. Y es que en verdad, Dalí es un artista muy exótico, cuyo arte es querido por algunos y no tan querido por otros...

Muy cerca de ahí, a escasos metros, se encuentra el fabuloso y nuevo London Eye, una especie de super rueda gigante donde se puede apreciar la vista de la ciudad, desde la altura. Intentamos subirnos pero eso si que era caroooooo!!!!!! Nos costaba mucho dinero y no teníamos tanto tiempo disponible, ya que había mucha gente para ingresar antes que nosotros. También se ven muchos artistas callejeros.

El Camden Market es un barrio en donde se pueden ver muchos punks, con su particular estilo de vestir y apariencia. Además es una zona comercial interesante de conocer. También conocimos el hermoso Covent Garden, junto con sus mercados y ferias permanentes, muy pintoresca y con mucha gente, y muchos negocios y movimiento.

Visitamos la Torre de Londres y atravesamos caminando el famoso Tower Bridge. En sus alrededores se pueden ver muchos rascacielos. Después fuimos a ver la famosa catedral de Saint Paul. Es increíble como la misma pudo conservarse prácticamente entera a los bombardeos que sufrió la ciudad en la Segunda Guerra Mundial. Visitamos Greenwich, en donde se encuentra el famoso observatorio, y que supuestamente divide al mundo en dos, en el Meridiano: el Este y el Oeste. Era curioso como te parabas a los costados de una línea, y de un lado una pierna estaba en un punto cardinal, y la otra en el otro.

No nos podíamos ir de Londres sin visitar el Buckingham Palace y su diario cambio de guardia. Respecto al mismo puedo decir que es demasiado largo, ya que la novelería de verlo a los turistas le dura poco (o por lo menos a nosotros). En verdad creo que no lo disfrutamos como nos hubiéramos imaginado.

Quedamos impresionados todos cuando visitamos el Museo de Historia Natural. No solo sus colecciones son increíbles, en donde lo que mas se destacan son los dinosaurios, sino que también el edificio es magnífico, de estilo gótico. Para llegar a este tuvimos que atravesar el Wellington Arch y la exclusiva tienda Harrod´s, que tiene precios totalmente prohibitivos para nosotros. Camino al mismo, descubrimos de casualidad la embajada y consulado de Uruguay, y fue muy emocionante verla.!!! Tambien fuimos al Museo de Ciencia pero estuvimos muy poco tiempo antes de que cerrara. Otra visita cultural la constituyó el Museo Británico, en donde vimos muchas ruinas egipcias, que no pudimos ver en Egipto.

La zona aledaña al albergue la recorrimos bastante. Anduvimos domingueando por la Oxford Circus y la espléndida Regent Street, y sus famosas y exclusivas tiendas. Es un paseo muy disfrutable, con glamour y lujos...

También tuvimos tiempo para algunos paseos no tan convencionales como por ejemplo haber ido a la famosa calle Abbey Road a conocer los estudios de grabación y haber repetido la foto del disco homónimo de los Beatles, cruzando la cebra. Para ello teníamos que detener o estorbar el tráfico, acción sobre la cual los ingleses deben estar acostumbrados, pues no debemos ser los únicos que pasamos por ahi para obtener semejante fotografía. Después fuimos al barrio de Notting Hill, donde se filmó la película de Hugh Grant.

Tuvimos tiempo también para realizar algunas visitas deportivas, que en lo personal me gustaron mucho. Llegamos hasta el famoso estadio del Arsenal Football Club (Emirates Stadium), pero no pudimos ingresar. De todos modos, ya con verlo por fuera era suficiente. Conocimos también el estadio del Chelsea, en el barrio de Fulham, sobre la Fulham Road, al cual sí pudimos ingresar por un portón abierto. Es un barrio hermoso, y ahora, por ese motivo, me hice simpatizante del Fulham también, en la liga inglesa.

Como no solo de fútbol vive el hombre, también tuvimos un paseo guiado por el All Englands Club, donde se desarrollan los campeonatos de Tenis de Wimbledon. Se encuentra en una zona residencial muy bonita y el mismo lo recorrimos en su integridad. La guía, en un perfecto y clarísimo inglés nos explicó alguna información relevante sobre la historia del club y las competiciones.

Como hecho anecdótico podría rescatar el haberme encontrado con mi amigo James. James es un inglés quien reside en Londres pero estuvo 2 años viviendo en Uruguay hasta el año 2006. Recuerdo todavía el día en Montevideo, que nos prometimos que saldríamos a tomar unas cervezas en Londres cuando yo viajara... Esa promesa por suerte la pude cumplir y nos encontramos en las afueras de Londres, en una zona llamada Richmond, en donde tomamos algunas cervezas y le conté de cómo la venía pasando en éste viaje de vuelta al mundo... La verdad que la pasamos muy bien.

En un principio nos habían recalcado lo caro que era Londres para nosotros, pero en verdad creo que tuvimos mucha suerte pues encontramos muy buenos descuentos en algunas tiendas y comprábamos en un super muy cercano al hotel y muy barato. Muchas tiendas tenían liquidaciones increíbles!!! Terminamos comprando muchas cosas porque no nos esperábamos semejantes precios... Para que se hagan una idea me compre un buso que estaba marcado a un precio de lista de 30 libras y lo terminé pagando a solo 5!!! Esto es cerca de 80% de descuento!!! Imagínense... Era increíble e imperdible!!!

La partida de Londres fue muy estresante!!! Nos fuimos en subte con un mundo de valijas que teníamos que cargar por varias cuadras y varias escaleras hacia la Victoria Coach Station para tomarnos el bus hacia Paris, el cual pudimos tomar gracias a que estaba atrasado!!! Realmente creí que perdíamos el bus pero de milagro lo pudimos tomar...Pero por suerte todo salio bien y emprendimos camino hacia Paris, habiendome quedado con la sensación de haber disfrutado Londres al máximo.